CIUDAD DE MEXICO | 16 de Oct de 2013 - 1:34 PM | Por: AGENCIAS
La mención de Nueva Zelanda trae imágenes de imponentes cordilleras, glaciares, praderas infinitas, helechos gigantes que se transforman en bosques inmortalizados por la trilogía cinematográfica de El Señor de los anillos del escritor J.R.R. Tolkien, donde el rugby es el primer deporte con espectáculo aparte del equipo nacional al hacer la haka, una danza en agradecimiento a la tierra previo a los partidos, y también porque en noviembre próximo buscarán su tercer mundial de futbol, está vez contra México en un par de enfrentamientos de repechaje.
Nueva Zelanda y México están tan alejados en muchos aspectos como su diferencia horaria (18 horas). El próximo 20 de noviembre, cuando en Wellington sean las 20 horas y se juegue el partido en el Estadio Westpac, en el país serán las dos de la madrugada y millones de noctámbulos estarán al pendiente de lo que suceda. Pasará que el Tricolor jugará por primera vez esta instancia, mientras que los neozelandeses la afrontarán por segunda ocasión consecutiva tras vencer a Bahrein en 2009 y clasificarse a Sudáfrica 2010.
México es obviamente un equipo de calidad y se podría argumentar, jugador por jugador, que sigue siendo el mejor equipo de la Concacaf, a pesar de su reciente racha. El Azteca es un lugar muy difícil para sacar algo, pero se trata de resistencia y carácter. Demostramos mucho de eso en el pasado, ¿por qué no otra vez?â€, dijo el técnico Herbert, quien ya trae al Tri en la mente desde hace tiempo.
En la página oficial de Facebook de la selección neozelandesa, el sondeo entre la afición arrojó que varios de ellos preferían a cualquier equipo centroamericano antes que México y dan vaticinios fatalistas del repechaje.
El pasado viernes 11 de octubre un sismo de 6.3 grados sacudió a Nueva Zelanda. Los jugadores del combinado nacional, denominado All Whites, no estaban ahí, sino en Estados Unidos, preparándose en una mini gira de dos partidos para enfrentar a Chivas USA con el que empataron a un gol y a Trinidad y Tobago (0-0, ayer).
Hasta el duelo contra México, Nueva Zelanda habrá jugado apenas seis partidos en el año, arrastrando la desdicha todavía de haber fracasado ante Tahití, en 2012, por el pase a la Copa Confederaciones.
El futbol es tan popular en Nueva Zelanda como el kiwi, un ave no voladora que por la alejada biodiversidad de Oceanía sólo se ha desarrollado en esa zona, pero del que quedan apenas 70 mil especies libres, pues se han visto afectadas por cientos de plagas. El futbol en cambio, se expandió desde hace muchos años. La federación de futbol de Nueva Zelanda fue de las primeras en registrarse en la FIFA y creada en 1891. Sucede que se populariza entre la población de 5 a 16 años y, posteriormente, el balompié se ve desplazado por el rugby.
La liga ASB Premiership, reorganizada en 2004, consta de ocho equipos, varios de ellos semiprofesionales y este año, debido a la baja de uno de ellos, el Youngheart Manawatu, que tuvo los peores números por tercer temporada consecutiva, ha tenido que entrar al quite la selección Sub 20 para llenar el hueco y foguear a los jóvenes.
Parece que le falta equilibrio futbolístico en muchos sentidos a Nueva Zelanda. El único club que ha tenido el capital para pagar a todos sus jugadores de manera profesional ha sido el Wellington Phoenix, oriundo de la ciudad donde estará México y que se mudó a la liga de Australia, país con el que, desde 1966, se ha mantenido una encarnizada rivalidad entre sus selecciones.
El técnico actual es Ricky Herbert, que representó a su país en el Mundial de España 1982, donde fueron el peor equipo de la competencia al perder por goleada todos sus partidos: Escocia 5-2, Brasil 4-0 y Unión Soviética 3-0.
Sin embargo, el Mundial de Sudáfrica 2010 fue muy diferente. Nueva Zelanda superó incluso a Italia en su grupo y fue el único equipo que no perdió en la Copa del Mundo al empatar sus tres juegos. De aquel equipo subsiste Rory Fallon, quien con su gol les dio el pase al Mundial del 2010 contra Bahrein y que juega en la liga escocesa con el Aberdeen. Winston Reid es quizá su mejor jugador militando ahora en el West Ham United, Shane Smeltz y Marco Rojas, este último de ascendencia chilena, también son reconocidos y se considera a Wynton Rufer, que participó en la liga alemana y suiza, como el mejor jugador de futbol de su historia.
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